Confesiones color rosa 1.

Exponer de cierta forma mi vida no fue una decisión fácil. Sabía que tenía un gran compromiso, y requería de un VALOR ENORME para llevar a cabo mis sueños. Hablaría de Dios, de mi pareja, mi hogar TAN sagrado para mí, mi familia, mis amigos, mis miedos, mis procesos, mi vida en general. Hablaría de amor propio, de luchas, de paz. Abriría la puerta a señalamientos, dudas, y si, a burlas también.

Empezaré por confesarles que hablar de uno mismo no es fácil, porque para poder hacerlo, para poder amarme, aceptarme, reconocerme y gustarme, tuve que pasar por muchas cosas, pero he aprendido muchísimo porque yo también me he sentido triste, he sentido que me he fallado, he vivido algunos días extraordinarios y otros no tanto. Hasta que un día, y gracias a Dios me di cuenta de todo el trabajo interno que tenia que hacer. Fue un proceso de revolcones íntimos, donde a veces buscaba afuera lo que realmente estaba dentro de mi, y obviamente recordarlos no es tan fácil.

Sin embargo, algo en mi interior me inquietaba de tal forma que ya no me dejaba dormir. SI, no me dejaba tranquila esa voz interior que me decía y me llamaba: ES HORA, es tu momento, te he creado para esto y está es tu misión. Y sí, esta es la visión de mi vida. Siendo tan claro este mensaje, me decidí. Cuando conoces a Dios, lo amas, y le entregas tu vida por completo, sobre todaaaas las cosas, no te pesa ese SI, aquí estoy, mi vida está a tu servicio, tómala, es para ti.

Fue así como me paré frente a mis miedos, los enfrenté y me transformé en alguien superior a ellos. Dios me convirtió en mi propio héroe. Me regaló una misión, dones, capacidades y me dijo que confiara sólo en El, yo decidí ser una sierva fiel y poner en marcha esos regalos. Convertirte en tu propio héroe también está en tus manos, y es que sólo tú tienes las herramientas para que tu vida se convierta en ÉXITO, pero si, HAY que trabajar duro.

Que siempre estoy feliz, no siempre. Pero si, casi siempre. Me esfuerzo por ser positiva porque descubrí que me hace sentir mejor. Mi cara de felicidad permanente se debe a la emoción y DECISION de ser feliz que embarga mi alma. Empiezo por decirte que es hora de que tomes la decisión y digas SI al emprendimiento, a salir de la zona de confort, a la gente que innova, persistente, decidida, que ama con el alma lo que hace. A renovarte todos los días, motivarte, cambiar de look, buscar dentro de ti ese no se que, que te haga tan feliz que sonrías con los ojos.

Que seas capaz de decir: no quiero esto en mi vida, ¡quiero esto! Que puedas asumir tus fallas con valentía, porque si, fallamos, somos seres humanos, quiero que perdones, te perdones y que logres encontrar la fortaleza para alinear tus emociones, depurar el alma y sanar todo aquello que te perturba. A consentir tu interior, escucharte, comprenderte, y sanar la relación más importante después de Dios que tenemos en nuestra vida: con nosotros mismos.

Conforme pasa el tiempo soy más exigente conmigo como mujer, quiero ser libre, libre en Dios (creéme hay una enorme diferencia), sin preocuparme por los códigos establecidos por unos cuantos que en lo personal me cansan. Vamos a pensar menos y a sentir más. Soy una mujer normal, he sido talla 6 y ahora soy talla 8, me siento bien conmigo misma en cualquier versión de mí, y eso significa que puedo ser quien quiera ser en cualquier momento de mi vida. Empezamos a ser felices una vez logramos salir de la conmoción, de las negaciones de la mente, cuando abandonamos los deseos del ego y realmente hablamos con el corazón.

Hoy soy más sincera, me conozco, me comprendo, soy feliz porque me siento sana por dentro y por fuera. Porque comprendí que ser valiente no es el punto, ser perfecto tampoco, se trata de controlar nuestros miedos y aprender a liberarnos de ellos. Ya no soy la misma, y estoy segura que tu tampoco. He evolucionado, para ser más humana y menos vanidosa, aunque sé que tengo un compromiso con Dios que me regaló mi cuerpo para cuidarlo, mantenerlo sano y armonioso. Soy echa a imagen y semejanza suya y no creo que El me quiera ver de otra forma si no en la mejor versión de mí.

La única manera de vivir en una constante transformación consiste en creer en ti misma. Cuando te conectas a ti misma, sabes quién eres, qué quieres y qué estas dispuesta a hacer para lograr tus sueños, nada te detiene. Pero cuando eres coherente, te respetas y no pretendes ser alguien más, eres INVENCIBLE. Yo no puedo cambiar el mundo, ni cambiarte, pero puedo invitarte a que perdones tus falsas creencias producidas por estereotipos, que llenes adentro, que nutras tu interior de cosas positivas: soy capaz, soy brillante, soy valiente.

El mundo nos ha enseñado a evitar sentir porque ser fuertes es la única opción y ser sensibles es para débiles. Que es mejor ser como todo el mundo para encajar con la sociedad, ABURRIDO. Que van a decir de mi, mejor me quedo quieta. MENTIRA, una mentira que te impedirá alcanzar tus sueños. Todas las personas que admiramos se atrevieron a ser diferentes. Comprender que abrirse a la sensibilidad, atreverse, será la única manera de lograr ver belleza en donde los demás no lo encuentran, será la única forma de tocar el corazón profundamente y poder ver arte en todas partes.

Transfórmate en esa persona que cuando logren probarte en todas tus facetas sea imposible de dejar, no por tu físico, si no por la belleza dentro de ti. Las conductas sociales nos obligan a ser de una forma y ahí llegan las preocupaciones, la competencia, la presión, la angustia. Yo logro salirme de ese caos y demostrarme que no vale la pena. Siempre me he dejado llevar por mi alma, salga bien o salga mal. Esa que no tiene limites porque no los quiere conocer, que vive para evolucionar rápida y constantemente. Mis hechos, mis obstáculos, mis días grises, mi única preocupación es vencerme y superarme a mí misma.

He comprendido que el tiempo es lo mejor que nos regala la vida. El tiempo nos convierte la noche en un nuevo día, a veces las situaciones llegan a nuestra vida para que aprendamos algo nuevo, para transformarnos y evolucionar hacia una nueva persona. Por eso debemos aceptar las cosas como se nos presentan a pesar de no comprenderlas, a pesar de que incomoden, duelan o nos den mucho miedo. La lluvia es tan necesaria como el sol, porque limpia y deja solo lo que se necesita. En tu mundo ideal puedes aspirar a muchas cosas, desear muchas cosas, y puedes empezar a ser feliz ya, porque para verte espectacular solo debes tener fe en ti. En este proceso puede ser más fácil criticarte y desmotivarte, pues no hay nadie que pueda herirte más que tú misma. ¿Por qué es mejor juzgarnos, que detenernos a sanar nuestros errores para así poder continuar?

En ocasiones lo único que hace falta es entender que debemos amarnos con sinceridad, la pérdida de confianza en sí mismo está relacionada directamente con nuestra estima. El amor propio es un sentimiento UNIVERSAL, es una fuerza que puede cambiar muchas cosas en tu vida. Hace que seas una persona consciente de que te mereces lo mejor, es decir, eres una persona digna de amar, ser amada y de recibir todos los tesoros de la vida. Mirar adentro es importante ante cualquier relación, emprendimiento o proyecto de vida porque una vez que encuentres que es lo que debes nutrir constantemente TODO CAMBIA. Si, es la luz, la luz que hay en tu interior. Si aún sientes miedo, la invitación es que confíes más en ti, en tus dones que son un regalo de Dios. Enamórate más de ti, NO, no es vanidad, es amor propio.

Si está bien, nos pasan cosas, cosas duras, que nos marcan, que duelen y que en muchas ocasiones no comprendemos. A esas cosas me gusta llamarlas MAESTROS. Los maestros no solo son personas que nos enseñan en el colegio o universidad, pueden ser esas circunstancias silenciosas que nos transforman, nos evolucionan. Si, esa persona que no soportas porque según tú percepción es de alguna manera, te está enseñando quizás a saber cómo NO debes ser, a tener EMPATIA. Aquel compañero de trabajo desleal, te está enseñando LEALTAD. Esa persona que te critica te está enseñando a ser FUERTE, y debe hacer que te den mas ganas de luchar por lo que quieres. Aquel hombre que se portó mal contigo, que te juzgó y que te hirió, te está enseñando a AMARTE Y VALORARTE. Identifica esos maestros silenciosos y agradece.

No quiero vivir sin sueños, y elegí hacerlos realidad todos los días, no quise vivir en conflicto y elegí el camino de la paz para que mis egos no ganen la batalla de entrar a mi corazón. Quiero aprender, evolucionar, y en este proceso puedo cometer errores, hasta que llegue el día, o no, en el que pueda mirarme al espejo y decirme a mi misma, que bien lo haz logrado. No quiero vivir del pasado, y elegí solo ver al horizonte sin limites. Elegí el amor por sobre todas las cosas. Dios es amor. Y en este camino de elegir, comprendí que hay cosas que llegan sin haber sido elegidas a transformar nuestras vidas, que la vida nos permite para tomar como lecciones. En este proceso, puede que me haya perdido pero comprendí que es la única manera que tengo para encontrarme con quien soy hoy. (Continua)

Tengo muchas más cosas que confesarles, así que seguimos en el próximo blog Confesiones color rosa (2) dos, me despido hasta entonces.

Besos, Mely.